Miles de personas visitan la Casa Rosada para despedir a Maradona
El pueblo argentino le da el último adiós a su máximo héroe futbolístico; hubo incidentes cuando abrieron las puertas para que entrara la gente.
Una nueva prueba de lo mucho que Diego Armando Maradona significa para el pueblo argentino está siendo ofrecida en la Casa Rosada, que desde hace varias horas recibe a miles de personas que quieren despedirse de él.
Durante la madrugada de este jueves, hubo un velorio íntimo, del que participó la familia del “10”, así como varios integrantes del plantel que logró la inmortalidad al conquistar el Mundial de México 1986 y varias personalidades del fútbol argentino, como el presidente de AFA, Claudio Tapia, o jugadores como Carlos Tévez, Javier Mascherano y Martín Palermo, por citar algunos ejemplos.
A las seis de la mañana se abrieron las puertas de la Casa Rosada para permitirle a la multitud que estaba reunida en la Plaza de Mayo (en realidad se ha ido renovando y sigue habiendo allí miles de personas) ir entrando lentamente para darle el último adiós a quien Eduardo Galeano definió como “el más humano de los dioses”.
Quienes ingresan recorren un sector en el que un vallado con la bandera argentina los separa del cajón, que fue envuelto con la bandera de Argentina y camisetas de Boca y la albiceleste. El flujo de gente ha sido constante, y la postal de personas llorando y aplaudiendo, a modo de agradecimiento de toda la alegría que les regaló “Pelusa”, interminable.
La idea es que el público pueda entrar hasta las 16.00 horas, aunque se dice que la inmensa cantidad de gente esperando aún para entrar a la Casa Rosada podría hacer que la familia Maradona decida que ese horario se extienda.
Hubo incidentes
Poco después de que se abrieran las puertas para que la gente pudiera despedirse de Diego, hubo incidentes entre la policía y quienes quisieron burlar la cola y los vallados para entrar en la Casa Rosada. Las puertas fueron momentáneamente cerradas hasta que las autoridades controlaron la situación, que incluyó amontonamientos, gritos e insultos.
Un rato después sucedió algo similar, cuando cientos de personas embistieron las vallas que estaban protegiendo la zona para poder ingresar al velorio. Hubo algunos heridos, pero la policía logró ponerle fin al asunto. Sin lugar a dudas, el día de hoy será inolvidable para todos los argentinos.